Recomendaciones generales:

  • Permanecer informados y ser proactivos: es importante que los adultos ayudemos a los más jóvenes en la adaptación de la vida en estos tiempos.
  • Educación: manténgase al tanto de nueva información y protocolos de salud (uso de mascarilla, lavado de manos, distanciamiento social). 
  • Establecer y mantener una rutina diaria: esto provee cierto sentido de control. También ayuda a que respetemos el espacio de los demás.
  • Estar atentos: de lo que se habla en el hogar y lo que se ve/escucha en televisión o radio. Si el ambiente es pesimista puede traer estresores. Una mente preocupada no aprende igual.
  • Prestar atención: preste atención a nuevas conductas o emociones en los miembros de su familia. Esto podría significar que necesitan mayor apoyo.  
  • Escuchar: las emociones de cada persona son válidas, tome tiempo para dialogar sobre cómo se sienten, y dudas o estresores que puedan tener.
  • Expectativas y responsabilidades: integre a sus hijos e hijas en las tareas domésticas (recoger, limpiar) de acuerdo con su edad.  Déjele saber lo que espera de ellos, esto permitirá reforzar la independencia, desarrollar destrezas de colaboración y fomentar el trabajo en equipo.
  • Monitorear tiempo de uso de electrónicos: entendemos que ahora pasaremos más tiempo haciendo uso de la tecnología para estudiar y divertirnos. Busque aplicaciones educativas que pueda integrar aprendizaje mediante el juego. Durante el tiempo libre, trate de alejarse de los electrónicos con juegos de mesa, tiempo al aire libre, experimentos caseros, entre otros.
  • Recargar energías: saque tiempo para usted haciendo algo que disfrute.

Aprendizaje desde el hogar:

  • Si se encuentra trabajando y la vez estará brindando apoyo educativo a algún familiar:
    • Dialogue con su equipo de trabajo para manejar el tiempo. Además, considerando sus nuevos roles, debe reflexionar sobre la posibilidad de no poder cumplir con la cantidad de trabajo que realizaba antes.
    • Esté mentalizado para manejar el cambio y adaptarse.  Es normal que sus hijos/as y familiares le interrumpan en algún momento y que sus dinámicas de trabajo cambien.
    • Busque opciones que se acomoden a sus necesidades laborales particulares. Por ejemplo: apoye en tareas académicas de sus hijos o familiares durante la mañana y dedique la tarde al trabajo; intercale el trabajo y los estudios, entre otras alternativas.
  • Si usted debe salir a trabajar y deja a su hijo/a bajo el cuidado de otra persona:
    • Mantenga comunicación activa con cuidador/a.
    • Pregunte a su hijo/a cómo le puede ayudar. Además, planifique actividades para compartir el tiempo que pueda con sus hijos/as en el hogar.

*Si se siente abrumado, busque ayuda. Para ayudar a los demás es importante que primero cuidemos de nosotros mismos.